31 de enero de 2008

REFLEXION: CUANDO NOS FALTA EL ENEMIGO

Hasta ahora el blog ha ido “funcionando” más o menos bien, porque parecía casi que todos “remábamos” en la misma dirección, excepto algunos como Sancho, Nani, sus pseudónimos y algún que otro más. Aclaro que los anteriores con el mismo derecho y libertad que el resto, faltaría más.

Resulta que las batallas que iban casi siempre en la misma dirección, nos parece que se iban ganando una tras otras y que los derrotados siempre eran los mismos, siempre claro está, bajo nuestra apreciación; otros pudieran tener una visión muy distinta.

Pero he aquí que de pronto casi nos quedamos sin enemigos a los que atacar. Los gobernantes comienzan a hacerlo bien, se impone la transparencia y la democracia y nos falta ese “a quién atacar”. Alguien, para mi acertadamente, propone un tema mensual, el Turismo. Se produce el primer “cisma”. Unos están a favor de una situación de la oficina, otros de otra, unos quieren que se abra la oficina los fines de semana, otros prefieren que se quede el horario actual. En fin, surge un primer desencuentro.

La gente comienza a crisparse un poco, van y vienen los mensajes confrontados, ideas distintas y búsqueda de culpables ante la situación. Para mi solamente se trata de una simple CRISIS. Ese tipo de crisis que tenemos todos en nuestras relaciones con los demás. Ese desencuentro entre unos y otros, que debe existir en cuanto a opiniones, no tanto en cuanto a criticarnos por tener ideas que chocan, debemos reflexionarlo cada cual y tratar de no “echar más leña al fuego”. En caso contrario comenzarán a “oírse voces” cada vez más altas que digan que “esto no es lo que era”, que “está derivando a rumbos desconocidos”, “que cada cual trata de imponer sus preferencias o intereses personales”, etc, etc.

Hoy tras unos días de ausencia, vuelvo para pedir a todos, comenzando por mi mismo, tranquilidad.

3 comentarios:

Garraio dijo...

Pues yo no estoy de acuerdo, amigo Nexo.
Me gusta tu estilo, a menudo estamos de acuerdo, y a menudo dejaremos de estarlo si no es por aquí, será en otros foros.

Para mí, todo es una cuestión de postura. Entré aquí para hablar de política en el sentido lato, no para ponerme un disfraz de carnaval permanente, y así aprovecharme para descargar mis iras o mis envidias sobre el Sr. Acuña, Cándido Moreno, o sobre algún forero que diga algo que vaya en contra de mis intereses personales.

Por eso, existen por aquí dos diálogos, el del sentido filosófico de la política local, o el de los intereses personales de algunos que se limitan a estar en la retaguardia, manifestándose solamente cuando algo les toca “personalmente” o a alguien de su entorno.

En la primera propuesta estoy dispuesto a participar libremente y que cada uno se ponga la careta, si es así como se encuentra bien.

Pero si la cosa deriva para formas injuriosas y calumniosas como considero que ya pasó, eso no estoy dispuesto a aceptarlo en el foro. Y es más, esos cobardes, al parecer, no saben que, por las malas, es una cosa fácil llegar a quien está por detrás de un nick.


Tal como Nexo, también yo cogí unos días para meditar.
Volveré a participar, pero dejo un aviso a la navegación. Malos rollos aquí, no. Cara a cara, es mas bonito.

Valentiano dijo...

Con el tiempo, Garraio, con el tiempo. Venimos de unos años en los que si decías algo en contra de alguién ya quedabas fichado para el resto y todavía no nos hemos acostumbrado a que podemos decir las cosas con libertad. Algún día te contaré que me ocurrió a mí cuando fuí a por un documento al Ayuntamiento. Tenemos miedo que nos llamen a casa preguntando que qué tenemos en su contra, que llamadas de esta calaña ha habido a patadas. Además muchos de vosotros decís que es mejor así, sin saber quién está detrás de cada nick, tan solo algunos os habeis identificado, aunque ya la mayoría va sabiendo quién está detrás de este o aquél seudónimo.
Saludos.

Nexo dijo...

Garraio no creo que la injuria y la calumnia se hayan dado por aquí. Algunos hemos recibido algún que otro "toque", que hemos aceptado de la mejor manera, pero no creo que la cosa haya ido más allá, al menos no quiero pensar que así halla sido.

De todas formas un tiempo de reflexión creo que nos ha venido bien a todos. Deben darse opiniones distintas si, pero con respeto a los demás y a las de los demás.