Carlos Dávila, director de La Gaceta, ha escrito en su pócima pestilente de cada día: “Este tío [José Luis Rodríguez Zapatero] es un cachondo. Si tuviera la más mínima dignidad (…) se habría vuelto a su casa, pero no: está, como Mubarak, pegado al sillón del poder. Yo no sé qué hace falta para que esta Nación maltratada plante cara a este personaje, pero sí sé algo: un año más meneando su gen destructivo y esto terminará como un erial”.
Comparar a Zapatero con Mubarak es un ejercicio nauseabundo, canallesco, ignominioso. Semejante equiparación retrata con exactitud a un agitador cavernario. Su exhortación a que la “Nación maltratada plante cara a este personaje” es una incitación implícita a la algarada, la rebelión callejera o el golpe de Estado. No se trata de una exageración, sino de la verdad.Peccata minuta
En relación con las salvajadas que pueden leerse en el periódico mencionado, lo dicho por nosotros es peccata minuta. En el editorial de ayer, titulado La España que encuentra Merkel hallamos lo siguiente: “¿Qué impresión de España se llevará la canciller ante las sospechas de complicidad del Gobierno con una banda de asesinos?” O más directo aún: “Presunta complicidad del Gobierno con ETA.”
Los del Toro Party
Los plumíferos de la extrema derecha, los partidarios del Toro Party más o menos camuflado, están dale que dale convirtiendo el caso Faisán en la prueba del nueve de que hay conexiones subterráneas entre el Gobierno socialista y ETA. Sólo gente taimada, sin escrúpulos, se atreve a sostener que Zapatero es protector o amigo de los terroristas y que Alfredo Pérez Rubalcaba le hace gustoso el trabajo sucio auxiliando a ETA.
Prensa amarilla/genovesa
Pero esto no lo subrayan únicamente en Intereconomía. Toda la prensa amarilla/genovesa se dedica a lo mismo con fruición, haciendo méritos ante los jefes del PP –muy interesados electoralmente en cargarse como sea a Rubalcaba y, por supuesto, a Zapatero- en base a una impúdica manipulación de los hechos.
Ingenioso Pons
Participan también en esta operación vomitiva los voceros oficiales de Mariano Rajoy. Esteban González Pons –siempre tan ingenioso- ha sentenciado que el caso Faisán “es igual que el GAL”. María Dolores de Cospedal sigue en su acreditada línea de cuanta más mierda, mejor y, desde luego, sin pruebas.
Como una losa
Según La Gaceta, “el PP cree que el caso Faisán acorrala a Rubalcaba y le inhabilita como candidato”. Otro titular: “El PP ve el Faisán como una losa sobre el ansia sucesoria de Rubalcaba”. Y es que al PP le importa un comino ETA y la madre que la parió. Lo que quiere la derecha es ganar a cualquier precio las elecciones y comerse el faisán.
Montañas y desiertos
Aznar necesitaba a ETA el día 11-M y continúa buscándola cerca -junto a Pedro José y compañía- y no en “montañas lejanas ni en desiertos remotos”. Ahora celebrarían que ETA dijera -en el caso Faisán- que, en efecto, Zapatero y Rubalcaba les hicieron favores. Y, si no, para ello hay numerosos fabuladores, como Jaime Mayor Oreja, en Genóva 13.
No hay comentarios:
Publicar un comentario