Adios, Zapatero, adios

Por fin. El demagogo mas grande de la historia de este pais, un mentiroso patologico que a todos dice lo que quieren oir, sin importar si es verdad o no, nos hace el enorme favor de abandonar el barco.

El individuo que se hizo con el poder gracias al 'No a la guerra', mantuvo a España en la guerra de Afganistan y luego nos hizo participar en la de Libia. El presunto incredulo que nego no se cuantas veces la crisis en epoca de elecciones, cuando sabia de sobra la que se avecinaba, nos deja.

El jeta que pone velas a Dios y al diablo (empresarios y sindicalistas, poned vosotros el orden), ese a quien los grandes banqueros de este pais tanto aprecian, debido a los pingües beneficios que gracias a el obtienen, se las pira.

El desgraciado que no tiene pudor en llamarse a si mismo socialista, a pesar de haber mandado a la miseria a millones de españoles. A pesar de que las grandes empresas y los grandes banqueros de este pais no han obtenido jamas mayores beneficios que durante su gestion. A pesar de que desde hace mucho tiempo en España no ha habido tantas diferencias entre ricos y pobres, se da el bote.

El demagogo que nos impone una ministra de Cultura que situa a Huelva en el Mediterraneo. A una ministra de Sanidad que cree fervientemente en las propiedades magicas de las pulseras Power Balance. A una ministra de Igualdad con la que se multiplica el numero de mujeres victimas de maltrato, nos abandona.

El tipo que aseguro que esta legislatura era la del pleno empleo y llevo a España a niveles historicos de paro. El que, como Tomas, nego la crisis cuantas veces fuera necesario con el fin de ser reelegido. El que hablaba de recesion cuando era crisis horrenda, se larga.

Ve con Dios, Zapatero. O, puesto que se te supone no creyente, vete a la mierda. Quizas sea una expresion mucho mas adecuada, debido a la desastrosa situacion en la que has dejado este pais. Gracias a mis impuestos disfrutaras de un sueldo vitalicio, que por supuesto no has querido derogar a pesar de las muchas voces que lo pedian. Vete, dedicate a oir desafinar a tu pareja en esos conciertos que, nunca mejor dicho, le conciertas. Disfruta de la pasta que te daran en el consejo de administracion de alguna gran empresa o banco al que durante estos años habras conseguido camelar.

Y, sobre todo, dejanos a los españoles en paz.